miércoles, 20 de enero de 2010
Pensamiento en voz alta (pero sin nadie delante)
pídele perdón luego.
Creas en él o no.
Es de bien nacido
disculparse ante lo desconocido.
sábado, 16 de enero de 2010
Poemilla de amor
en un Pequod que no lleva a ninguna parte,
ni a los mares del sur ni a la ballena blanca.
Lleva a nuestra verdad en mayúsculas.
Lleva al Hagakure.
Lleva a la irracionalidad del coito.
Ya no buscamos el amor. Esa empresa la dejamos hace tiempo.
Debemos buscar lo que nos apetezca.
Libre albedrío.
Dos cuerpos en una cama se encuentran
antes y mejor
que un ballenero encuentra el norte.
sábado, 9 de enero de 2010
Primer microrelato
La mujer se fue con el amor de la mano. Él se dejó caer en un bar (su bar, el de siempre), se emborrachó y, a la mañana siguiente, abrió un blog.
Antes que nada, me presento:
A los quince años pensaba que los poetas ligaban mucho y empecé a escribir. Me enamoraba, escribía y nada; me enamoraba, escribía y nada; me enamoraba, escribía y nada; así, in sécula seculorum, hasta que no me comí un rosco. Con veinticinco primaveras, he acabado siendo guionista y escribiendo, casi, a todas horas. Si escribo bien o mal no me toca a mí decirlo. Quien quiera leer mis travesuras que las lea. Las voy a dejar todas aquí. Como un samurai, empiezo una aventura personal e intransferible. Escribir es lo único que me ha acompañado a lo largo de estos años. El niño de quince ya se ha empachado de rosquillas, de roscones y de otras aventuras amorosas. Ahora escribo para mí y para quien quiera leerlo.
Honor y fuerza.